Etas son las coberturas fundamentales que conviene tener en cuenta en tu seguro del hogar. Protección para bienes al aire libre Si tienes una casa con una amplia terraza o incluso si tienes un chalet, esta cobertura te resultará muy útil, ya que se encarga precisamente de esos objetos que tengamos al aire libre y que estén más sujetos a robos o daños por fenómenos atmosféricos. Protección frente a daños eléctricos Aunque la mayoría de los productos incluyen cobertura por este tipo de siniestros, no todos los hacen en las mismas condiciones. A estos efectos, cabe tener en cuenta el límite de la indemnización que nos ofrece, si se excluyen algunos objetos por antigüedad o por no superar un importe determinado. Daños estéticos La cobertura de daños estéticos es una cobertura que se encarga de reponer estéticamente la composición de los elementos del continente o contenido tal y como se encontraban antes del siniestro. Atascos Esta cobertura no suele estar incluida salvo que la póliza incluya la cobertura de asistencia. Al respecto lo más importante es que la Aseguradora garantice un tiempo de respuesta óptimo, ya que de demorarse los daños pueden agravarse. Daños producidos por fenómenos atmosféricos Tienen unas condiciones mínimas que han de ser superadas para que la cobertura entre en vigor. En el caso de las lluvias, suele exigirse que haya llovido un mínimo de 40 l/m² en una hora. Llaves y cerraduras La mayoría de los seguros cubren los siniestros relacionados con la pérdida de llaves o el deterior de las cerraduras. Daños en tuberías Generalmente los seguros ofrecen cobertura para la localización y la reparación de daños ocasionados en tuberías que discurren debajo de la tierra que se encuentra debajo de la vivienda aunque estos daños tienen un importe como límite que conviene tener en cuenta. Replantación de árboles y plantas del jardín Esta cobertura es muy útil si contamos con un jardín en el que tengamos árboles o plantas plantados, ya que serán repuestos en caso de siniestro. Defensa jurídica Cada vez es más frecuenta que las compañías ofrezcan la defensa jurídica que nos protege hasta un límite fijado de cualquier gasto judicial relacionado con las coberturas del seguro de vivienda. Esto incluye los gastos de notario, abogado y procurador, las costas judiciales, fianzas o peritaciones.